Líderes en transporte de mercancía paletizada

En El Mosca somos expertos en el transporte de mercancía paletizada, nos avalan más de 80 años de experiencia como líderes en el sector español. 

En un planeta cada vez más interconectado y global, el transporte de mercancías tiene una relevancia capital. Y, dentro de ese contexto, el transporte paletizado es de las formas más prácticas y seguras de mover diversas cantidades de cualquier producto de un lugar a otro.

En este artículo, te revelaremos en qué consiste exactamente el transporte de mercancía en palets y cuáles son las principales variantes. Además, descubrirás qué tipos diferentes de palets existen y cuál es el más indicado según el producto a distribuir.

¿Qué es el transporte de mercancía paletizada?

Se denomina transporte paletizado de mercancías a todo aquel tipo de transporte en el que la mercancía es envasada en palets antes de dar entrada al proceso logístico.

La mercancía paletizada ofrece comodidad y seguridad tanto al transportista como al cliente, dado que permite la inmovilización del producto, su protección ante golpes, caídas o roces, y la llegada a destino como una unidad de fácil manejo y catalogación.

Al mismo tiempo, el transporte de mercancía paletizada resulta clave para garantizar la recepción, carga/descarga y elevación del producto, pues al ubicar la carga en palets de medidas estandarizadas, puede ser tratada en cualquier lugar.

Todo esto la convierte en una modalidad de transporte globalmente aceptada por su economía de espacio y costes.

¿Qué tipos de palets existen y para qué mercancía se recomiendan?

El transporte de mercancía puede llevarse a cabo en diferentes tipos de palets. En función de las necesidades específicas de preservación de determinados productos, en el transporte de mercancía paletizada podremos elegir:

  • Palets de madera. Son los más extendidos pues resultan económicos, pesan poco y son muy versátiles. Se emplean tanto para el transporte de productos tecnológicos como para alimentos. 
  • Palets de cartón. Se trata de un tipo de palet poco habitual en industrias genéricas, si bien bastante empleado en el transporte de productos perecederos. Al ser de único uso, garantiza la asepsia.
  • Palets de plástico. Por su capacidad para mantenerse limpios y su resistencia a la humedad, esta clase de palets permiten envasar mercancías refrigeradas. Además, tienen la ventaja de ser reciclables. Se usan sobre todo en el transporte de alimentos.
  • Palets de metal. Se reservan para cargas especialmente pesadas. Son altamente resistentes y duraderos pero resultan muy caros.

Por otro lado, los palets pueden tener diversas medidas, aunque por lo general siguen el patrón europeo (1.200×800 milímetros) o el americano (1.200×1000 milímetros).

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